Ciudad de Panamá, Panamá. Una reunión “urgente” entre las autoridades indígenas del país convocará próximamente la Coordinadora Nacional de los Pueblos Indígenas de Panamá (COONAPIP), anunció el presidente de este gremio, Marcelo Guerra, a raíz de los actos de “violencia, abuso e incluso la discriminación que aún persiste en pleno Siglo XXI”.
El anuncio de Guerra es la respuesta a un video que circula en redes sociales en el que se observa a un hombre que, con machete en mano, agrede, amenaza e insulta a personas de la etnia gnäbe, en medio de un desalojo en una finca en el distrito de Boquete, provincia de Chiriquí.
Informes preliminares indican que los desalojados son familias indígenas que habrían laborado por años en la finca, supuestamente propiedad del agresor.
“Te dije que tú no puedes estar aquí, qué haces tomando video de la verg… quita esa maric… cholo maric… que te pasa a ti, tomándome vainas a mí”, son algunas de las palabras que se escucha, en el video de 57 segundos, por parte del hombre que agrede con el machete al autor del registro, quien solo encontró apoyo de una señora indígena que se interpuso entre ambos.
Además del video, la denuncia también cuenta con instantáneas que retratan a las familias con niños a la orilla de la calle, y con sus enseres amontonados.
“Vamos a investigar esa situación del video, no nos vamos a quedar de brazos cruzados, porque hay que parar eso. No es la primera vez que sucede este tipo de amenazas hacia la población indígena, que sale a buscar su sustento, yo no sé qué hacen las autoridades, el gobierno… Todos somos iguales, somos igualmente panameños, no puede seguir dándose esa situación, mucho menos discriminación en pleno Siglo XXI”, dijo Guerra a Pulso Mundial News (PMN).
El presidente de COONAPIP instó a las autoridades judiciales y policiales a tomar cartas en el asunto, así como instituciones que velan por la familia y al Ministerio de Trabajo y Desarrollo Laboral (Mitradel), ya que también denunció situaciones de explotación, malos tratos y condiciones laborales deplorables que soportan no solo familias indígenas que trabajan las fincas de la citada zona, solo para ganar unos cuantos dólares. “Qué sucede muchas veces, que le pagan salarios pequeños, y les dicen: si quieres, si no te largas. Es una situación complicada”, indicó.
“Como líderes, molesta ver esta situación de atropello y discriminación. Eso no se puede seguir dando. Las leyes parecen que están para los que tienen poder económico, para empresarios, pero no para la gente humilde, pobre”, expresó Guerra, quien informó que también expondrá el caso ante organismos de derechos humanos.
El dirigente reiteró que convocará a una reunión de líderes indígenas para ventilar el lamentable hecho y para exigir que las autoridades investiguen a la persona responsable de afectar “la dignidad humana de la familia en Boquete”.